La Superliga ya entró en la recta final y aún no hay nada definido. Pero está claro que la lucha por el título será un mano a mano sin respiro hasta la última fecha entre River y Boca. Restan sólo cuatro jornadas y los dos equipos más ganadores de la Argentina intentarán sumar otro título a sus vitrinas, con el plus que implica dejar al eterno rival con las manos vacías. En fin, otro capítulo más para la vasta historia de un clásico enfrentamiento que en los últimos años no da tregua.
En caso de obtener la Superliga, la institución de Núñez alcanzará el torneo local 36° y Boca, el 34°. Sin embargo, este campeonato significa mucho más que un número. Por un lado, Marcelo Gallardo intentará saldar una cuenta pendiente y conseguir un trofeo que se le hace esquivo desde que asumió como director técnico, en junio de 2014. Por su parte, el conjunto de la Ribera buscará tomarse revancha y cortar con una seguidilla de resultados positivos que favorecen a su máximo rival. ¿Qué le queda a cada uno para quedarse con la gloria?
A primera vista, el fixture del club presidido por Jorge Ameal parece ser apenas más accesible. Sin embargo, en el fútbol argentino cada partido es un mundo y la victoria de los “débiles” frente los “poderosos” es moneda corriente. El próximo domingo 16 de febrero, desde las 19.40, River recibirá en el Estadio Monumental al Banfield de Julio César Falcioni, que se encuentra decimoquinto y no conoce la derrota desde hace diez partidos. Dos horas después, el Xeneize se medirá en Santiago del Estero ante el recién ascendido Central Córdoba, que marcha decimoséptimo con 24 puntos.
Por la jornada 22°, el equipo del Muñeco visitará La Plata para enfrentarse ante un Estudiantes con refuerzos de renombre tales como Javier Mascherano y Marcos Rojo. Ese domingo 23, la Bombonera será el escenario del encuentro ante Godoy Cruz, que perdió seis de los últimos siete compromisos y está último, con sólo nueve puntos de 54 posibles.
Fuente: Clarin